La Política Fiscal del SAT, para los más versados, se trata de la luz que guía y permite dirigir y tener en orden nuestras obligaciones en materia fiscal. Para otros, con mucho menos experiencia y campo recorrido, parecerá más como un acertijo que habrá que ir desentrañando de a poco.
Pero, trátese de unos u otros, se hace necesario destacar que esta política es el eje rector de nuestras vidas fiscales, y es responsabilidad de cada quien cumplir a carta cabal con lo establecido en sus códigos, leyes y procedimientos.
Así que, si queremos hacer bien la tarea, conviene conocer estos 5 puntos importantes para entender la política fiscal del SAT.
¿Qué es un contribuyente?
Son las personas obligadas al pago de impuestos, de conformidad con las leyes fiscales vigentes; dichas personas se clasifican en dos grupos: Persona Física o Natural y Persona Jurídica o Moral, ambas deberán estar dadas de alta ante el Sistema de Administración Tributaria (SAT) y generar ingresos por realizar alguna actividad económica.
¿Qué son los impuestos?
Los impuestos son una contribución (pago) en dinero o en especie, de carácter obligatorio, con la que ayudamos a fortalecer y nutrir la economía del país. En todo sistema económico internacional, los impuestos sirven para procurarle los recursos necesarios al gobierno a fin de alcanzar metas y objetivos propuestos en su planeación y orientadas al desarrollo como nación.
¿Por qué debemos contribuir?
Es un deber fundamental de todos, consagrado en la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, Art. 31, Fracc. IV, que establece la obligatoriedad de los ciudadanos a contribuir de manera proporcional y equitativa a los gastos públicos del país, a través del pago de impuestos, objetivo que se logra cuando cada uno cumple su parte con honestidad, respeto, compromiso y responsabilidad.
¿A dónde van los impuestos?
La recaudación de impuestos está destinada a la satisfacción de diversas necesidades de carácter público como son: la educación, la impartición de justicia, la seguridad, hospitales, proyectos de infraestructura y servicios de vías públicas, planes y programas de apoyo al desarrollo social y económico, entre muchos otros que serían incosteables sin nuestras aportaciones.
¿Qué pasa si no contribuimos?
Además de incurrir en graves faltas fiscales, con sus correspondientes sanciones, el no pagar impuestos limitaría la capacidad del gobierno para destinar los recursos suficientes a fin de cubrir las múltiples necesidades de servicios por parte de nuestra sociedad.
Entre otras cosas, la Política Fiscal del SAT busca:
- Combatir la defraudación fiscal, principalmente de EFOS (nombre dado a las empresas que facturan operaciones simuladas) y EDOS (aquellas empresas que deducen operaciones simuladas).
- Una mayor fiscalización a los grandes contribuyentes y a los asesores fiscales mediante los esquemas reportables.
- Obligar a los contribuyentes a reportar toda operación relevante.
- Tipificar los delitos fiscales, así como la compra-venta de CFDI´S (comprobantes fiscales digitales por internet), como un delito grave que amerita prisión preventiva.
- Eliminar la compensación fiscal, la cual afecta a los contribuyentes al no poder cubrir impuestos con saldos a favor de otros impuestos.
Con todo lo anterior, se concluye que la política fiscal del SAT se centra hoy en una serie de acciones que obligarán a los contribuyentes a controlar mejor sus operaciones con proveedores y prestadores de servicio, así como supervisar de cerca los esquemas fiscales agresivos de los grandes contribuyentes, obligando a estos y a los asesores fiscales a reportar cualquier esquema que resulte agresivo, según lo estipula el CFF (Código Fiscal de la Federación) en su título VI.
Asimismo, se elimina la posibilidad de compensar el pago de impuestos, lo cual evita el traslado de saldos a favor y genera problemas de flujo de efectivo en muchas empresas.
Para entender mejor las estrategias de recaudación del SAT y considerarte un asesor plenamente calificado, encuentra estos y otros importantes puntos en la Compilación Fiscal 2022 de Thomson Reuters.
